
[Opinión] El Exceso Judicial Ataca de Nuevo Mientras un Juez Activista Impone Políticas de Salud Radicales
Bueno, bueno, bueno, amigos. Aquí vamos de nuevo, otro caso de intromisión del Gobierno en asuntos que no le conciernen. Un juez federal, John Bates, ha decidido que los burócratas saben más y ha ordenado al gobierno federal que vuelva a publicar información sanitaria importante que había retirado con razón. Porque nada grita más "gobierno limitado" que jueces no electos obligando a las agencias a impulsar la ideología de izquierdas.
Retrocedamos. Cuando el Presidente Trump —bendito sea su coraje— intentaba devolver a este país al sentido común, firmó una orden ejecutiva para eliminar de nuestras agencias de salud pública tonterías pseudo-científicas y con motivaciones políticas. El Departamento de Salud y Servicios Humanos, los CDC y la FDA cumplieron diligentemente, retirando páginas llenas de propaganda sobre la supuesta "ideología de género". Porque, al final del día, la biología es biología, y ninguna cantidad de intromisión activista va a cambiar eso.
Pero aquí viene el poder judicial, flexionando sus músculos donde no debe. Doctors for America —un grupo que casualmente está alineado con la izquierda radical— presentó una demanda, y el juez Bates, en lugar de respetar la autoridad ejecutiva, se apresuró a ponerse del lado de los activistas. Ahora, estas agencias tienen hasta el 11 de febrero para volver a publicar esa información, reforzando la obsesión de la izquierda por impulsar la política de género bajo el disfraz de "atención médica".
Y, como era de esperar, los sospechosos habituales lo están celebrando. La máquina de indignación profesional, completa con activistas disfrazados de científicos, afirma que esta sentencia es una victoria para las "comunidades marginadas". Pero lo que realmente quieren decir es que es un paso más para borrar los valores que construyeron este país en favor de la última moda progresista.
Mientras tanto, conservadores como el Senador Mike Lee están denunciando esto, con razón, por lo que es: un ataque a la autoridad presidencial. Incluso Elon Musk, que generalmente centra su atención en cosas como los viajes espaciales y la libertad de expresión, intervino para denunciar lo absurdo de que los jueces actúen como "editores de sitios web". ¿Y quién podría culparlo? ¿Desde cuándo los tribunales pueden dictar qué información debe promover una agencia federal?
Seamos honestos: esto no se trata de atención médica. Se trata de control. Se trata de asegurarse de que sea el gobierno, y no los padres, los maestros o las iglesias, quien decida lo que se les enseña a los niños sobre biología e identidad. Se trata de obligar a los contribuyentes a pagar las cruzadas ideológicas en lugar de centrarse en los problemas de salud reales que afectan a los estadounidenses de a pie.
El juez Bates puede haber emitido su fallo, pero la lucha no ha terminado. Si los conservadores no se defienden, las compuertas permanecerán abiertas de par en par para una mayor extralimitación del gobierno y un mayor activismo financiado por los contribuyentes. Así que levantemos una copa, no por este fallo, sino por la buena lucha que tenemos por delante. Porque el sentido común todavía vale la pena defenderlo.